Curación de contenidos: un método alternativo para la centralización, conservación y difusión de conocimiento
¿Qué es lo que sucede en la WEB en un lapso de 60 segundos? Según el artículo de Colombia digital del 2014 “se envían alrededor de 168 millones de mensajes” se realizan 694 mil búsquedas en google, y se actualizan 695 mil de estados en Facebook; tanta información aglomerada puede ser perjudicial, a esto se le denomina infoxifixación.
Dentro de las diferentes herramientas que existen para realizar gestión de información, hoy en pleno siglo XXI se impone un método que no solo gestiona, sino que también permite delimitarla para que el usuario tenga material selecto y filtrado, este accionar se le denomina <curación de contenidos> y surge con la necesidad de buscar, encontrar, seleccionar y compartir parte de la gran cantidad de contenidos que existen en internet.
Por otro lado, es muy importante entender que la curación de contenidos no es buscar soluciones en internet; mas por el contrario conlleva una búsqueda sistemática mantenida en el tiempo por el que se filtra y selecciona toda la información que se tiene disponible en internet y el contenido que creemos importante, con un propósito concreto.
En consecuencia, se inmiscuye un nuevo perfil del profesional especialista en la administración de la información, pues una nueva demanda es realizar gestión digital en cantidad, para proveer información de calidad acorde a las necesidades del usuario dependiendo su tipo.
Perfil profesional del curador
El o la persona que realice y desarrolle este mecanismo debe tener mínimamente ciertas habilidades y formación académica ya que no cualquiera puede agrupar información dando valor agregado como lo demanda la curación. Dentro de estas habilidades y competencias, el profesional debe realizar gestión de la información por tanto tiene que contar con habilidades de búsqueda e identificación de fuentes relevantes.
Por otro lado, también tiene que contar con habilidades organización para grandes cantidades de información. Este profesional debe saber trasladar los contenidos orientados a un grupo determinado. También debe tener conocimiento en diferentes temas y sobre todo debe estar actualizado constantemente para finalmente agregar valor a la información.
Por esto, diferentes autores como por ejemplo Bhargava, R. (2011) explica que desde su perspectiva existen 5 tipos de curación:
· Agregación: consiste en reunir la información más relevante sobre un tema específico en una misma publicación o plataforma.
· Destilación: se trata de analizar uno o más contenido para llevar a cabo una presentación más simple y unificada de las ideas principales con capacidad crítica.
· Elevación: consiste en la identificación de tendencias y en si difusión en pequeñas piezas de información o posts en redes sociales.
· MAshup: consiste en la combinación de contenidos seleccionados para crear un nuevo contenido con un punto de vista más o menos original. Se considera la parte del proceso creativo e indispensable para la innovación.
· Cronología: procura establecer relaciones causa efecto para identificar posibles patrones. Líneas de tiempo e infografías elaboradas por curación podrían corresponder a buenos ejemplos para esta modalidad.
Dentro de este campo también existen los denomínanos “republicadores” de contenido que no es lo mismo que un curador, para que podamos identificar a un republicador, el autor Robin Good realizo un listado para poder reconocer a este:
· No agregan valor adicional republican sin contribuir.
· No editan, no contextualizan o redirigen a un público en particular.
· No seleccionan: republican simplemente porque incluye ciertas palabras claves sin prestar atención al significado
· No filtran, no analizan el valor intrínseco o la relevancia para el tema especifico.
· Les importa más la cantidad que la calidad de lo que publica.
· Buscan ahorrar tiempo y ser rápidos, sobre todo: esto no es un problema, pero sin duda va en contra de los objetivos de la curación.
· Prefieren enfoques amplios antes que un enfoque temático fuerte y especifico.
· Les importa más la cantidad que la calidad de lo que publica.
· Buscan ahorrar tiempo y ser rápidos, sobre todo: esto no es un problema, pero sin duda va en contra de los objetivos de la curación.
· Prefieren enfoques amplios antes que un enfoque temático fuerte y específico. Tratan de abarcar un público lo más amplio posible.
Figura 1: Formas como se puede llevar a cabo la curación de contenidos.

Nota: Recuperado de “Formas como se puede llevar a cabo la curación de contenidos” de Mejia, J, 2017 Beneficios de la curación de contenidos.
El futuro de la curación de contenidos es la sabia combinación de los algoritmos con el criterio humano.
Hay que reconocer que la aplicación de este método “curación de contenidos” nos permitirá recuperar y administrar muchos datos, por ende, no se trata de algo fácil. Gracias a las nuevas tecnologías esto es muy ejecutable y con un conjunto interdisciplinario- coordinado se podrá realizar; esto nos permitirá llegar a una evolución de Sociedad de la información a ser una sociedad del conocimiento, que divulgue y promueva la investigación y el conocimiento.
“No se puede dirigir si no se sabe analizar, y no se puede analizar si no hay datos verídicos; y si no hay todo un sistema de recolección de datos confiables, sin mentiras y globos, si no hay toda una preparación de un sistema estadístico y de hombres habituados a recoger el dato y transformarlo en números. Esta es una tarea esencial” Ernesto Che Guevara.
__________
Escrito por Ana Ysabel Laura Arandia, enviado a la Escuela Crítica de Filosofía Política en Bolivia, y publicado el 01 de junio de 2020.
Bibliografía:
Bhargava, R. (2009) Manifesto for the content curator: the next big social media job of the future?. Influentional Marketing Blog. 30 de septiembre de 2009 recuperado de https://www.fundeu.es/recomendacion/responsable-de-contenidos-mejor-que-content-curator/
Crosetti, B. Bárbara (2013). Agregación, filtrado y curación para la actualización docente. Pixel- Bit. Revista de Medios y Educación, 2013, (42): 157-169. Consultado el 2018.
Guallar, J. (2013). El content curator, guía básica para el nuevo profesional de internet. Barcelona: UOC
Juárez Popoca, D.; Torres Gastelú, C. y Herrera Díaz, L. (2017). Las posibilidades educativas de la curación de contenidos: una revisión de literatura. Apertura, 9 (2), pp. 116-131. http://dx.doi.org/10.18381/Ap.v9n2.1046
Odetti, V. (2016). Educación y tecnologías en perspectiva. Montevideo: FLACSO.

Comentarios
Publicar un comentario